Este tipo de bizcocho es el que se utiliza como base
para la elaboración de tartas.
INGREDIENTES:
4 huevos medianos
125 g de azúcar
110 g de harina floja
(de repostería)
20 g de almidón de maíz (maicena)
Una pizca de sal
½ cucharadita de aroma de vainilla
(opcional)
½ cucharadita de ralladura de limón
o de naranja (opcional)
El molde a utilizar será el adecuado para el tamaño y la forma de la tarta a elaborar posteriormente. Por ejemplo para el bizcocho de las fotos de esta receta yo he utilizado un molde circular de 25 centímetros y el bizcocho lo he partido por la mitad, saliéndome dos bases de un espesor de algo más de 1 centímetro. Una de ellas la he utilizado para hacer una tarta al whisky y la otra la consumismos en el desayuno como si fuese un bizcocho normal.
ELABORACIÓN:
Precalentar
el horno a 180 ºC para asegurarnos de que está bien caliente al terminar de
preparar la mezcla. Mejor calentar el horno sin aire, con calor arriba y abajo.
Preparar el
molde forrando el fondo con papel sulfurizado y engrasando las paredes con
aceite y espolvorear un poco de harina.
Hay que
tener en cuenta que este bizcocho no lleva levadura y crece gracias al aire que
se mete en los huevos al montarlos.
Preparación
de los ingredientes para el bizcocho:
Separar las
yemas de las claras de todos los huevos.
Tamizar un
mínimo de tres veces la harina de repostería mezclada con la maicena.
Preparar la ralladura de limón o de
naranja.
En un
recipiente grande batir, con la ayuda de una batidora de varillas, las yemas de
los huevos con la mitad del azúcar, durante unos 5-10 minutos, hasta que quede
muy esponjoso. Añadir la vainilla y batir un poco más.
En otro bol
grande colocar las claras con una pizca de sal y la ralladura de limón o
naranja. Batirlo todo con la batidora de varillas a la máxima velocidad. Cuando
empiece a blanquear, sin dejar de batir, añadir poco a poco la otra mitad del
azúcar y seguir batiendo hasta que se forme un merengue firme.
A
continuación echar una cucharada de las claras montadas sobre el batido de
yemas reservado anteriormente e ir añadiendo la harina tamizada poco a poco y
mezclando con una espátula de cocina, mediante movimientos envolventes. Una vez
todo mezclado añadir el resto de claras montadas y seguir mezclando suavemente,
siempre con movimientos envolventes para evitar que las claras se bajen.
Ya con toda
la masa lista, verterla dentro del molde, distribuirla bien e igualar la superficie.
Hornear a
media altura sobre una rejilla durante unos 30-35 minutos. La masa debe de
crecer bastante. Comprobar que está cocida pinchando con un palillo en el
centro hasta ver que sale seco.
Una vez
finalizada la cocción, sacar del horno y
dejar enfriar un poco. Pasar un cuchillo por los bordes para despegar el
bizcocho, desmoldar y colocar boca abajo sobre una rejilla hasta que enfríe por
completo.
Una vez
frío, el bizcocho genovés se habrá asentado y tendrá forma de disco uniforme.
Ahora toca cortarlo en los discos del espesor que deseemos y utilizarlo para
preparar la tarta a nuestro gusto.
Los discos
que no se vayan a utilizar se pueden envolver en film de plástico y congelarlos
para otra ocasión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario